¿Te imaginas trabajar gratis?
¿Encadenar mes tras mes contratos por un salario de 3€ la hora o por nada?
¿Que te prometan que te van a hacer un contrato decente que nunca llega?
¿Y que cuando hay que renovar definitivamente tu contrato te dicen adiós con una sonrisa mientras otro recién titulado ocupa tu puesto, ilusionado como un recién enamorado?
Pues en esas están la mayoría de nuestros ilustres y bien preparados becarios o recién titulados. Con más de un 50% de paro entre los jóvenes, hay que tragar. ¿O no?
El mundo laboral en España siempre ha sido complicado. El ilusorio período de la burbuja inmobiliaria fue eso, una ilusión y solo entonces España tuvo cifras de paro comparables con la de nuestros admirados vecinos.
Quiero distinguir entre becario (estudiante en prácticas) y un recién titulado con contrato en prácticas o similar: este último ya está capacitado profesional y legalmente.
Los trabajos en prácticas siempre fueron remunerados: en mi caso como alumno de náutica (equivalente a un becario: eran prácticas obligatorias de 1 año incluidas en los estudios) recibía un sueldo de unos 300 €/mes en el año 1983.
Según la OCDE en España se permite que a los becarios se les maltrate. El 58% de los becarios españoles no reciben ni sueldo ni ayuda, y de entre los que lo reciben, no les da ni para el alquiler a 7 de cada 10. Hay excepciones (Deloitte, Banco de Santander, etc.) pero me temo que son pocas.
Menudo chollo: 1,2 millones de recién titulados o próximos para titularse (universitarios o de FP) trabajando gratis o casi gratis.
En España todo está legislado: El Real Decreto 1543/2011, por el que se regulan las prácticas no laborales en empresas, establece que el salario o beca debe ser del 80% del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (unos 426€). Pero me temo que se aplica poco, o es interpretable, como eso de que Hacienda somos todos.
Si miramos alrededor: En Francia se ha establecido por ley (y aquí sí que se aplica) un mínimo de 436€ mensuales a los becarios (no al de primer empleo, contrato en prácticas, etc.); en Holanda varía entre los 700 y 1200€; en Alemania se ha establecido recientemente un salario mínimo (8,5€/hora) que es aplicable a los contratos en prácticas una vez finalizados los estudios (en el caso de prácticas obligatorias –becados- esa cifra no es aplicable pero aún así son remuneradas) y La Comisión Europea dispone de un sistema de becas (duración máxima 5 meses y no se puede repetir) cuyo salario ronda los 800€.
Además esto de trabajar en prácticas es una falacia. Se puede tener un salario reducido en tu primer empleo, a medida que ganas la mínima experiencia necesaria. Pero ese periodo es corto, muy corto. Un par de meses a lo sumo (si necesitas más tiempo, malo).
¿Os imagináis a un ejecutivo trabajando por nada o un salario irrisorio hasta que se entere de qué va su nueva empresa? De hecho, todo jefe o jefecillo necesita un tiempo de adaptación y aprendizaje, robando además mucho tiempo al resto del personal. Propongo que a los nuevos Directores de RR.HH. de las grandes empresas se les aplique un contrato en prácticas por 200 € hasta que se enteren. A ver que tal les sienta.
A mi arquitecta preferida, recién titulada y con dos premios internacionales de Arquitectura, le han ofrecido un contrato en prácticas. Su contratación tiene un objetivo definido cuál es la implementación en la empresa de un novedoso proceso de gestión de proyectos. O sea, que de prácticas nada. El sueldo es de 4 €/hora. Ha dicho que no y les ha dejado con la boca abierta.
Muchachos, decid que no cuantas veces sea necesario hasta que vuestros conocimientos y ganas sean valorados debidamente o iros al extranjero. Nuestros empresarios no os merecen.
P.S.: mi arquitecta preferida fue contratada por otra empresa al cabo de dos semanas con un salario adecuado a sus conocimientos y experiencia. CUANTO ME ALEGRO.
Clarísimo. Hay que decir que no, ya está bien de abusos.
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